Aarón Mercury sorprende al confesar: “Nunca me vi como finalista”
1 octubre, 2025En una noche cargada de tensión, lo que no pasó fue más fuerte que lo que sí. Durante la gala del sexto finalista de La Casa de los Famosos México, una simple omisión encendió las redes: Alexis Ayala no tomó la mano de Dalilah Polanco ni de Shiky al formar la tradicional cadena de buena vibra. La dejó, literal, con la mano al aire.
Cuando Shiky fue salvado por el público, Dalilah hizo un nuevo intento por conectar con Alexis en una noche tan importante. Extendió la mano de nuevo, pero él se negó, mantuvo las suyas entrelazadas y evitó el gesto completamente. Un detalle pequeño, sí, pero que gritó lo que las palabras no se atrevieron a decir.
La escena ocurrió el 1 de octubre, en el jardín de la casa, mientras Galilea Montijo se preparaba para anunciar al eliminado. Todos esperaban nervios, pero nadie anticipó esa señal de frialdad: Alexis se quedó al margen, rompiendo con una costumbre que se ha vuelto ritual en el reality.
Lo más impactante fue la distancia emocional evidente entre Alexis y Dalilah, algo que no era nuevo. Esa frialdad ya se había notado durante semanas de convivencia, donde las diferencias entre ambos se volvieron cada vez más notorias.
Este distanciamiento no surgió de la nada. Hubo varias discusiones previas. Una de las más recordadas fue cuando Dalilah, con muletas por una lesión, le pidió a Alexis que moviera un colchón que le bloqueaba el paso. Él reaccionó con molestia, y desde entonces, la relación se fue enfriando. A eso se sumó una caída de Dalilah durante una gala, que aumentó su vulnerabilidad, y momentos incómodos donde Alexis incluso le insinuó que debería abandonar la competencia por no estar al cien físicamente.
A pesar de esto, Dalilah fue salvada en múltiples ocasiones por el público. Días antes de esta última gala, Alexis intentó tender un puente diciéndole que haría lo posible por llevarse bien en su última semana dentro de la casa. Pero esa “reconciliación” nunca se concretó. Ni miradas, ni roces, ni conexión. Muy distinto al compañerismo que otros nominados han mostrado en sus últimas noches.
El gesto —o más bien la ausencia de él— no pasó desapercibido para el público. En redes, los comentarios explotaron: ¿problemas personales? ¿Ruptura de alianzas? ¿Estrategia o simplemente frialdad emocional? Las teorías no se hicieron esperar, pero una cosa quedó clara: las emociones estaban al límite.
Además, muchos recordaron que días antes Alexis le había hecho una promesa a Dalilah: “Te la voy a poner fácil esta semana”, le dijo, con la intención de llevar la fiesta en paz. Incluso le dejó claro que no tenía intención de competir directamente con ella: “Yo no vine a fijarme si tú haces más o menos que yo, a veces hacerte a un lado es no estorbar. Los dos merecemos quedarnos, lo decidirá la gente.”
En esa misma conversación, Alexis también explicó su postura dentro del juego: “Yo sí vine a ponerme un traje que se llama La Casa de los Famosos México. Para mí no es personal, vine a trabajar.” Y cerró con una frase que ahora, tras su eliminación, retumba aún más: “Realmente no me conociste, estás muy enojada.”
Palabras que, en retrospectiva, parecen explicar más de lo que mostraron las cámaras.
Cuando se reveló que Alexis quedaba fuera del juego, en sexto lugar, se acercó a Dalilah para darle un beso en la mejilla. Un gesto rápido, mecánico, que más que reconciliación pareció una formalidad sin emoción.
Dalilah, visiblemente afectada, se desplomó al enterarse que había sido salvada, dejando ver el impacto emocional de la noche. No fue la única. En el Cuarto Noche, Abelito, Mar y Aldo rompieron en llanto, dejando claro que la salida de Alexis, su líder, los desestabilizó por completo.
En un reality donde todo se magnifica, una mano que no se toma o una mirada que se evita puede decir más que mil palabras. Y eso fue exactamente lo que pasó. El público no solo vio un juego, también interpretó los gestos, los silencios… y lo que leyó entre líneas fue mucho más intenso que cualquier diálogo.
¿Fue estrategia, distanciamiento personal o simplemente un mal momento? Solo ellos lo saben. Pero en La Casa de los Famosos, hasta los silencios hacen ruido.
*Este texto fue revisado por una inteligencia artificial (IA).