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“Ya va a tocar mi papá”, gritó emocionada desde su butaca en la Arena Monterrey una pequeña, al ver que su padre se preparaba para actuar en “Navidad Sinfónico en Monterrey”. La vocecita era de Emma, quien, acompañada de sus abuelos paternos, mamá y su pequeña hermana, disfrutó orgullosa del talento del ensamble universitario que preparó un concierto especial para la temporada.
En familia, como es la intención de la OSUANL al realizar este tipo de encuentros musicales de navidad, la pequeña disfrutó al máximo la velada. Emma Arévalo y su familia, como el resto de invitados a esta noche de celebración, escucharon las melodías tradicionales de Navidad.
El programa compuesto por villancicos de México y el mundo, obras del repertorio clásico, cánticos tradicionales de las posadas mexicanas para orquesta, coros y cantantes, logró conectar con el público que se dio cita en la Arena Monterrey. Por segunda ocasión consecutiva, la OSUANL, dirigida por el Maestro Eduardo Diazmuñoz, cumplió con la audiencia al ofrecer un variado programa que creó una atmósfera festiva previa a la Navidad.
“Blanca Navidad”, “Noche de Paz”, “Rodolfo El Reno”, “Paseo en trineo” y “Santa Claus is Coming to Town”, entre otras piezas, se presentaron al público que recibió con gusto la extraordinaria muestra de talento.
Fue en esta última pieza en la que apareció el personaje gordo de traje rojo, lo que animó aún más la velada; previamente, Santa Claus estuvo en los pasillos de la Arena para recibir las cartitad de los niños y posar con las familias para la foto del recuerdo.
En el programa se hizo un espacio especial para la obra “Las Posadas”, recopilación de Ramón Noble, orquestación de Eduardo Hernández Moncada con los arreglos y reorquestación del maestro Eduardo Diazmuñoz, en la cual se canta la posada tradicional mexicana completa. La soprano regiomontana Yvonne Garza y el tenor Sergio Blázquez lucieron sus instrumentos vocales en cada una de sus intervenciones, lo que imprimó un sello de calidad en este concierto especial.
La fiesta no podía terminar sin el clímax correspondiente: Un coro monumental en el que se unieron las voces del talento de 120 personas sobre el escenario entre músicos, cantantes, el Coro Nuevo León y el Coro Infantil Voces de Esperanza con el de los asistentes para entonar “Noche de paz”, cuyas letras se proyectaron en las grandes pantallas del recinto.
