El rápido reflejo de su guardaespaldas evitó que Luis Miguel cayera del escenario en un intento por saludar a una fanática durante su gira de conciertos el pasado fin de semana en Newark, Nueva Jersey.
De no ser que el guardaespaldas lo toma de la cintura, El Sol hubiera caído desde lo alto del escenario, un accidente por el que ya han pasado muchos famosos.
La Columnaria Blog