Una Katy Perry galáctica y vibrante desata euforia en Monterrey
29 abril, 2025Durante su presentación en el Auditorio Citibanamex en Monterrey, la cantante argentina Cazzu volvió a generar conversación al referirse de manera indirecta —pero contundente— a las críticas que ha recibido por su estilo escénico. En un ambiente cargado de entusiasmo y euforia por parte de sus fans, la artista expresó que “todo estaba bajo control”, haciendo alusión a quienes suelen reaccionar con escándalo ante sus shows.
Frente a un público que la ovacionó durante toda la noche, Cazzu bromeó sobre el cierre de su concierto y cómo este tipo de espectáculos suelen ser malinterpretados:
“Vamos llegando al final y todo se desvirtúa, como siempre Cazzu. Después salen las señoras horrorizadas… Horrorizadas. Pero no se preocupen. Esta es la verdadera fiesta y está todo bajo control. Cazzu todo bajo control”, dijo en tono sarcástico, jugando con su nombre para remarcar que tiene el control de su show y de la narrativa.
Sus palabras resonaron de inmediato entre los asistentes, quienes comenzaron a corear en voz alta: “¡Oíste, Pati Chapoy!”, en clara referencia a las declaraciones que la conductora de espectáculos había hecho meses atrás, cuestionando tanto la capacidad de convocatoria como la puesta en escena de la cantante.
En su anterior show en el Auditorio Nacional, Cazzu ya había reaccionado a las críticas mediáticas, recordando que algunos sectores de la prensa dudaban de su éxito en México. Ese episodio pareció marcar un punto de quiebre entre la artista y algunos medios, especialmente por los comentarios relacionados con su vestimenta, su lenguaje corporal y su relación pasada con Christian Nodal.
Pese a las especulaciones, la artista logró llenar el Auditorio Nacional en dos ocasiones consecutivas, dejando claro que su música conecta con un público fiel, diverso y en crecimiento.
Una fiesta diversa y emotiva
Más allá de las indirectas, el concierto en Monterrey fue una verdadera celebración. Cazzu agradeció profundamente el cariño de sus fans y compartió momentos muy emotivos con ellos. Una pareja que celebró su boda durante el show recibió un regalo especial de la artista: su autógrafo en una copia de su libro, que ellos mismos le hicieron llegar al escenario.
Además, una fan disfrazada de piñata —cuyo original vestuario sorprendió gratamente a la cantante— fue invitada por Cazzu a subir al escenario para bailar junto a ella, sumándose a la fiesta en un ambiente de cercanía, espontaneidad y complicidad con el público.
Durante la noche, Cazzu ofreció un recorrido musical cargado de emociones y contrastes, donde combinó baladas intensas con ritmos urbanos. Temas como Ódiame, Sobre mi tumba y Piénsame pusieron al público en un estado reflexivo, mientras que canciones como Peliculeo, Toda y Nada encendieron la energía del recinto con beats vibrantes y letras desafiantes. A lo largo del show, también interpretó piezas como Inti, La Cueva y Tú y yo, demostrando su versatilidad artística y una conexión genuina con la audiencia. Cada canción fue recibida con entusiasmo, coreada por un público entregado que acompañó a la cantante desde la primera nota hasta el final del espectáculo.
Conexión profunda con su audiencia
Al cierre del show, Cazzu se tomó un momento para reflexionar sobre su evolución artística y la diversidad de su público:
“Antes, mi música llegaba a personas que se sentían diferentes, únicas… y ahora me escuchan jóvenes, adultos, madres, abuelas, esposos. Para mí eso es un regalo hermoso”.
La cantante celebró que su música haya logrado unir a personas de distintas edades y estilos de vida, y expresó su emoción por haber llenado un recinto tan importante. Entre aplausos y ovaciones, el público le gritó con entusiasmo: “¡Cazzu, hermana, ya eres mexicana!”, a lo que ella respondió con una sonrisa y un rotundo: “¡Sí soy!”.