Mary Boquitas escribirá libro y aclara:"Yo no hice daño a Ana Dalai, porque era su madrina"

Mary Boquitas sorprendió ayer en el programa El Gordo y La Flaca, de Univisión al dar fuertes declaraciones sobre su pasado en el clan Trevi Andrade y aclaró ella sería incapaz de haberle hecho algún daño a la hija de Gloria Trevi, Ana Dalai, porque fue su madrina de bautizo y anunció que para aclarar tantos rumores sobre éste y otros aspectos de su vida escribirá el libro: “La Boquita que nunca habló”.

Dejó claro que ella era la esposa de Sergio Andrade y en todo caso es quien tiene el derecho de escribir un libro, no todas las demás chicas que escribieron los propios y afirmó que lo que narró Karina Yapor de que temió  Boquitas destazara el cuerpo de Ana Dalai para tirarlo a un río de Brasil vino de su mente fantasiosa.

Además si bien dijo no existía una amistad fiel entre ella y Gloria Trevi, sí le reclama permitiera creciera su imagen de la mala de esta historia y se reforzara cuando no quiso darle la mano en la obra Aventurera, si sabe que siempre estuvo con ella y la cuidó cuando murió Ana Dalai.

Aclaró no presenció la muerte de la niña porque Sergio la mandó a comprar pollos para comer y los cortaba en la cocina, y dijo ante la cámara eso fue probablemente lo que escuchó Karina, el ruido no era porque estuviese cortando el cuerpo de la niña, porque ella sería incapaz de hacerle daño.

En la entrevista cuestionó la imagen de víctima que Gloria Trevi se impuso luego de salir de la cárcel.

“Aquí no hay víctima. Lo que halla pasado, porque yo no estuve ahí, además Sergio Andrade y Gloria Trevi, los padres de esta niña saben perfectamente que yo nunca le hubiera hecho algo; Gloria sabe perfectamente eso, ni porque él me lo hubiera ordenado; hubiera preferido ganarme 20 cinturonazos. Nunca le haría algo a una niña de 33 días de nacida, ni viva, ni fallecida, porque a esa niña la quise, por algo ellos me escogieron para ser su madrina de bautizo”, reveló.

Ella se enteró de la muerte de Ana Dalai cuando Katia de la Cuesta regresó de una recámara con la niña muerta y recordó que:”Gloria se tiró en un grito desgarrador, Sergio corrió hacia la niña, él me le la dio, y Liliana me la quitó de los brazos para darle resucitación y se metieron a una recámara. Yo me hice cargo de Gloria y la cuide día y noche por tres días, ella estaba en un estado espantoso y se quería morir igual que su hija, ella quería que yo me hiciera cargo de darle cristiana sepultura a su hija, pero el señor Andrade dijo que no”.

“Si nos ponemos a pensar y si perdonamos y olvidamos, soy un ser humano bueno e hija de Dios, pero hubo estas cosas (de cuidado hacia Gloria) que no vieron”, dijo.

Es ahora que Mary Boquitas se anima a hablar y narrará el maltrato psicológico y físico que vivió con Andrade.

Al igual que denunciaron las chicas del clan, señaló que Sergio les daba de comer un revoltijo de alimentos echados a perder,  batido con huevo crudo y agua; si se vomitaban tenían que comerse su propio vómito.

¿Por qué no huir? Estaba dominada y el único momento en que su padre intervino para llevársela de regreso a casa, inmediatamente llegó Sergio acompañado de su hermano, Eduardo Andrade Sánchez, entonces senador, para apuntarle a su progenitor con una pistola en la sien. Ella corrió al lado de su esposo, porque sin él se sentía nada.

Concluye Sergio quería formar su propia familia, de una manera muy particular y fuera de lo establecido, porque él tenía sexo comunitario con todas las chicas del clan, aclarando que nunca vio a Gloria Trevi, y ella tampoco participó, y lo evitó al mintir a su esposo que sostuvo un romance con un músico para que le tuviera asco en la intimidad.

Sergio Andrade tenía gustos especiales en cuanto al sexo y el suceso más impactante, compartió  fue cuando la sentó en una silla, recreando una escena de la película Naranja Mecánica y le puso palillos en los ojos, para que viera un video de imágenes pornográficas.

“Fue terrible, eran imágenes que nunca debí haber visto”, considera.

Cree su libro será de ayuda para muchas mujeres y puede ser su salvación si viven una vida de sumisión, dependencia y abuso como la que ella vivió.

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