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Matthew Perry ,de 51 años, era inalcanzable, pero hoy anuncia que deja la soltería porque se ha comprometido con su novia, la agente literaria Molly Hurwitz, de 29.
Quien diera vida a Chandler en Friends, detalló a People: “Acabo de pedirle que se case conmigo. Por suerte para mí, estoy saliendo con la mujer más maravillosa del planeta y ha dicho sí”.
La pareja lleva dos años de relación y su romance se destapó al ser captados a la salida de un restaurante de West Hollywood. Aunque ellos no gustan de exponer su vida privada, Perry no postea nada en su cuenta de Instagram de su novia a en sus redes sociales, ella la tiene en modo privado.
A Matthew la relación más larga que se le conocía era con la actriz Lizzy Caplan, romance que duró por seis años, pero dieron por terminado en el año 2012.
El amor para él tuvo sus altibajos, salió con Yasmine Bleeth, pero no prospero y tampoco fue así con Julia Roberts, relación que solo duró unos meses. Maeve Quinlan, Rachel Dunn y Lauren Graham también está en su lista de romances.
Ahora la suerte en el amor le ha llegado, luego de que él reconociera que fue un hombre de problemas, adicto a los analgésicos y alcohol, cuando tenía gran fama por “Friends”.
“Durante unos ocho meses estuve encantado de ser famoso. Hasta que me di cuenta de que la fama no iba a arreglar las cosas que no funcionaban. Creía que la popularidad me haría feliz, pero no fue así. Y me llevé una profunda decepción”, declaró a “XL Semanal”.
Un accidente esquiando le llevó a empezar a consumir analgésicos. Ese fue el principio de su fin. Ingresó hasta en dos ocasiones en clínicas de desintoxicación. Durante la emisión de la popular serie, él llegó a tomar 30 pastillas y un litro de vodka al día. Reconoce en dicha entrevista que en su familia ya hay antecedentes de alcoholismo. No fue hasta 2001 cuando Perry decidió que su vida tenía que cambiar: «Estaba metido en un problema muy gordo; mi vida era un infierno».
En la misma entrevista reconocía que su sueño era formar una familia: «Mi sueño es encontrar a la mujer de mi vida, tener hijos y convertirme en un buen padre y esposo. Nunca imaginé que a los 46 años seguiría estando soltero». Parece que Molly Hurwitz es esa mujer.
