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11 noviembre, 2009Carlos Villagrán realiza una gira por Perú y después de eso contempla retirarse de los escenarios; confesó a la prensa de ese país que los celos profesionales de Roberto Gómez Bolaños por el éxito de Quico hizo él saliera del programa: “Yo no me fui del Chavo del 8, me sacaron”,aclaró.
Narra que Chespirito y sus compañeros no pudieron soportar que fuera Quico quien destacara en todas las giras que realizaban y la prensa se abocará con él en las entrevistas; se dieron los celos y todo terminó en una mítica pelea con el creador de El Chavo, al tal grado que él no puede representar a Quico en México y para presentarlo fuera del país lo cambio a Kiko, pero sobre esta enemistad dice no ha dicho muchas verdades.
“Lo que creo es que no dije muchas verdades entonces. En esa época no lo permitían. Lo que pasó es que cuando empezó a aparecer Quico más formado, comenzaron las envidias, egoísmos y los celos profesionales. Íbamos a giras y casi el 70% de las preguntas iban dirigidas a Quico, y eso a los demás compañeros les daba envidia, concretamente a la Chilindrina y a Ñoño. Eso fue pudriendo un poco la fruta”.
Sobre su salida del programa confiesa no fue decisión de él, sino que lo sacaron.
“No tomé decisiones, a mí me sacaron, y Don Ramón se salió por compañerismo, por solidaridad y porque fue un grande. Al salir Don Ramón, el programa se cae, porque él era una pieza clave en el ajedrez”, señala.
Cuando él salió de El Chavo y automáticamente también de Televisa sintió dolor, porque Emilio Azcárraga antes le había propuesto para que hiciera un programa, pero ya como Carlos Villagrán y el encargado de producirlo sería Roberto Gómez Bolaños, al acararle al director general de Televisa que había enemistad entre ellos, El Tigre le dijo que no le importaba y le valían “mierda sus diferencias”, entonces el actor simplemente se paró y se fue. Se le cerraron todas las puertas.
…”Me dijo: “Quiero que hagas un programa sin cachetes, supervisado por Chespirito”. Claro, después de haberme dicho primero: “Te vas y te parto la madre”. Le dije: “¿Me permite?”. Y me dijo: “¿Sí o no?”. “Pero, permítame explicarle”, insistí. “¿Sí o no?”, volvió a decir él. “Pues no, porque hay diferencias entre Chespirito y yo”, contesté. Y me dice: “Me valen una mierda tus diferencias”. Y por ese orgullo que tenemos todos, me paré y le dije: “No, señor, muchas gracias”. Eso bastó para que me vetara. Mandó faxes a todos lados y Televisa es muy poderosa, es un monstruo”.
Trabajó siete años en Venezuela y once años en Argentina, donde el programa era un éxito, tras 20 años de veto recibió una llamada de Adal Ramones.
“Hace un tiempo me llamó Adal Ramones, del programa “Otro rollo”, de México, y me dijo: “Oye, acá han venido los Backstreet Boys, Arnold Schwarzenegger, pero me falta Quico”. Y le digo: “Pero es que yo estuve vetado veinte años”. Me dice: “Sí, yo sé que estuviste vetado veinte años, pero ya no lo estás”. Y yo le dije: “Qué curioso, ahora que me acabas de hablar tú, yo acabo de vetar a Televisa por otros veinte años”.
Finalmente, señala que desearía Roberto Gómez Bolaños lo demande por los derechos de Quico, pero “le tiene miedo”.
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