Cansada de los cuestionamientos sobre quién es el padre de su hijo, Sherlyn respondió que Dios.
“Dios es el papá de mi hijo, vive con nosotros, respiro, hablo (con él) y se lo encomiendo todo el día”, respondió a la pregunta de si vivía con el padre de su hijo y el por qué no lo da a conocer.
“Creo que no podría tener un mejor papá”, agregó ante la sorpresa que ocasionó con su respuesta.