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19 octubre, 2025- La actriz falleció el 11 de octubre a los 79 años. Su familia confirmó que la causa fue una neumonía. Pero lo que más ha conmovido es su último acto de amor: dejar parte de su fortuna a su perrita Reggie…
El mundo del cine está de luto tras el fallecimiento de Diane Keaton, una de las actrices más emblemáticas y queridas de Hollywood. La familia de la ganadora del Oscar confirmó que la causa de su muerte, ocurrida el 11 de octubre, fue una neumonía. La noticia, anunciada a través de un comunicado a la revista People, ha conmocionado a fanáticos y colegas alrededor del mundo.
Keaton, quien dejó una huella imborrable en la historia del cine, murió a los 79 años. Fue trasladada en estado grave desde su residencia en Los Ángeles a un hospital local, donde finalmente perdió la vida. Hasta el momento no se han anunciado actos públicos o monumentos en su honor, pero el impacto de su partida ya se siente profundamente en la industria.
La actriz, nacida Diane Hall en enero de 1946, supo ganarse un lugar en el corazón del público gracias a su talento, carisma y autenticidad. Desde su papel inolvidable en Annie Hall —que le valió su primer Oscar— hasta su interpretación de Kay Adams en El Padrino, Keaton demostró una versatilidad y naturalidad que pocas estrellas logran igualar.
Su estilo irreverente y particular, como ese icónico look con bombín, chaleco y pantalones caqui que lució en Annie Hall, se convirtió en símbolo de una época e inspiración para generaciones. Su famosa frase “La-dee-da, la-dee-da” aún resuena como parte de la historia del cine.
A lo largo de su carrera, fue reconocida con cuatro nominaciones al Oscar, además de su victoria en 1978, un momento que recordó con su característico humor: “Esto es algo”, dijo entre risas al aceptar el galardón.
Aunque provenía de una familia fuera del mundo del espectáculo —su madre era ama de casa y fotógrafa, y su padre trabajaba en bienes raíces e ingeniería civil—, Diane Keaton se convirtió en un ícono cultural que rompió moldes y dejó un legado artístico y personal que trasciende el tiempo.
Entre los gestos que más han conmovido tras su fallecimiento, se encuentra el destino de parte de su fortuna a su perrita Reggie, una golden retriever que fue su compañera inseparable desde 2020. Este acto, tierno y profundamente humano, ha sido aplaudido por su compromiso con el bienestar animal.
Detalles del legado a Reggie:
Keaton destinó 5 millones de dólares a un fideicomiso para asegurar el cuidado de Reggie, incluyendo su manutención, atención veterinaria, cuidadores y una residencia privada. Además, el fondo contempla donaciones periódicas a organizaciones de rescate animal.
Una vez que Reggie fallezca, el fideicomiso continuará operando, destinando recursos a causas de protección animal, perpetuando el activismo silencioso que Keaton practicó durante años.
En redes sociales, Diane compartía momentos entrañables con Reggie. Su última publicación en Instagram, con motivo del National Pet Day, mostraba a la perrita acompañada de la frase: “Mi corazón en cuatro patas”. Hoy, esa imagen se interpreta como una despedida simbólica.
Un amigo cercano resumió su gesto de la mejor manera:
“Quería que Reggie viviera con la misma dignidad y humor con los que ella vivió. Es lo más Diane que uno puede imaginar: excéntrica, generosa y profundamente amorosa”.
Hoy, sus películas, su estilo y su espíritu viven en el recuerdo de quienes la admiraron. Diane Keaton no solo fue una actriz extraordinaria, sino una fuerza creativa única, una leyenda del cine y un alma libre que nunca será olvidada.
*Este texto fue revisado por una inteligencia artificial