Sin el beneficio de libertad condicional, el médico Conrady Murray fue condenado hoy por la muerte de Michael Jackson a cuatro años de prisión, la máxima pena solicitada por la fiscalía. Murray quien vestía un traje gris tuvo en todo momento un rostro adusto y no hizo exclamación alguna al recibir la sentencia.
El pasado 7 de noviembre un jurado lo declaró culpable de homicidio involuntario por causar la muerte del Rey del Pop al suministrarle el analgésico propofol.