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Últimamente, Lupita TikTok —una influencer mexicana que se ha ganado el cariño (y también las críticas) del público por su estilo tan auténtico y sin filtros— ha sido tema de conversación en redes sociales. Su espontaneidad y forma de mostrarse tal cual es le han valido tanto apoyo como cuestionamientos, especialmente en esta nueva etapa de su vida como mamá primeriza.
Desde el nacimiento de su hija Karely Yamileth, el pasado 16 de abril, Lupita ha enfrentado comentarios sobre su forma de criar, algo que tristemente muchas madres enfrentan en internet. Aun así, ha sabido mantener su esencia, compartiendo momentos de ternura, amor y complicidad con su pequeña. Estos gestos cotidianos han resonado con miles de seguidores, quienes destacan su entrega y dedicación como madre.
No faltaron los consejos —algunos bien intencionados, otros más invasivos— que comenzaron a lloverle apenas dejó el hospital. Comentarios como: “Ponte faja, Lupita”, “No debes comer grasas, cuídate”, “La dieta tiene que ser blanda y luego normal, nutritiva, sin harinas, picantes ni refrescos”, o “Nada de tacos, mi reina, porque es la primera vez que das pecho a tu hija”, se leían por decenas en sus publicaciones. También hubo quienes le decían que debía comer bien, sobre todo caldos, “para que tengas leche y puedas amamantar a tu bebé”, y que se cuidara “para que cierre bien la cesárea”.
A pesar de toda esta avalancha de comentarios, Lupita no perdió su esencia. Su pareja, conocido en redes como Sonrris Medellín, no dudó en salir en su defensa. En varias publicaciones ha dejado claro cuánto admira a Lupita por su compromiso con Karely, y ha compartido detalles que reflejan todo el esfuerzo y cariño que ella pone en el cuidado de su hija.
Uno de los momentos más comentados fue justo cuando salieron del hospital. Mientras Sonrris llevaba en brazos a Karely, Lupita caminaba a paso veloz, captando la atención de todos. Ya en casa, no dudó en hacer lo suyo: apareció al fondo de la escena con una sopa instantánea en una mano y un refresco de cola en la otra. Un momento que, lejos de ser planeado, fue 100% Lupita: honesta, real, y con ese toque de humor que tanto la caracteriza.
Más tarde, entre risas y anécdotas del día, Lupita le confesó a su esposo que también tenía antojo de tacos. Sonrris, con su típica sonrisa, le respondió con dulzura: “Amor, ya nació la bebé”. Una frase simple, pero cargada de emoción, que reflejaba todo lo que estaban viviendo como nueva familia. Y es que, al final, estos momentos tan reales son los que más conectan con quienes la siguen.
A veces, lo más valioso de las redes es ver historias reales. Y Lupita, con todo lo que es —sus aciertos, sus errores y sobre todo su autenticidad— nos recuerda que no hay una única forma de vivir la maternidad… ni de ser uno mismo en internet.
*Este texto fue revisado por una inteligencia artificial (IA)